Hay días, en algunas personas más que en otras, en los que te encuentras deprimida, sin ganas de nada, piensas que todo lo malo te pasa a ti, que no hay quien tenga peor suerte que tú…
Es cierto, que podemos permitirnos algún día así, no todo es color de rosas, pero también es cierto que cuando solemos tener un día malo, tendemos a exagerarlo demasiado. Cuando es un día, nos lo podemos «permitir» como acabo de decir, pero si ya pasan más días, hay que replantearse qué está fallando en nuestra cabeza porque no todo puede ser malo, y hay que sacar lo positivo de cada día y de nuestra vida.