El proceso terapéutico comienza con la primera sesión. La primera sesión puede generar curiosidad y, a veces, nerviosismo o ansiedad. Muchas personas llegan con ciertas ideas o expectativas sobre cómo será y el resultado que obtendrá una vez finalice. En ocasiones, estas expectativas se ajustarán a la realidad y otras no.
La primera sesión es la primera toma de contacto que permitirá ir afianzando la alianza terapéutica, elemento imprescindible en terapia. A continuación, vamos a desarrollar algunas posibles expectativas que pueden tener quienes inician un proceso terapéutico.