María Villegas. Psicóloga

¿Por qué sufrimos recaídas?

Chico fumando en un sofá

Las adicciones consisten en hábitos de conducta difíciles de superar, tanto en el caso de las adicciones con sustancias como sin sustancias, ya que la persona pierde el control sobre su propia conducta. Una parte importante de las adicciones que hay que considerar son las recaídas, ya que es algo que hay que trabajar durante la superación de la adicción.

El modelo de prevención de recaídas de Marlatt, nos indica que podemos encontrar tres tipos de situaciones que se relacionan con la mayoría de las recaídas: los estados emocionales negativos, los conflictos interpersonales y los contextos de presión social. Por ello es importante aprender a manejar este tipo de situaciones, ya que una situación de alto riesgo supone incrementar la posibilidad de volver a realizar la conducta adictiva, facilitando así una recaída.

Es importante que cuando trabajemos para superar nuestra adicción, nuestro/a terapeuta nos entrene en habilidades de afrontamiento para dichas situaciones difíciles que se pueden plantear, nos ayude a manejar la ansiedad, a distinguir situaciones de alto riesgo y nos motive hacia la “abstinencia” (abstinencia total en el caso de adicciones con sustancia y control de la conducta en el caso de adicciones sin sustancia). Asimismo, es fundamental trabajar la capacidad de control de la persona y modificar las posibles distorsiones cognitivas que pueda tener.

¿Todas las personas que sufren una adicción recaen?

No. Cuando una persona permanece alejada de su adicción durante un tiempo prolongado (1-2 años) es muy poco probable que recaiga. Esto se debe a que la persona ha conseguido controlar su conducta y puede enfrentarse con éxito a distintas situaciones de su día a día.

Abandonar una conducta adictiva es complicado debido a la gratificación inmediata que ésta provoca en el individuo. Sin embargo, esto se puede ver facilitado o no en función de los factores de riesgo o protección que tenga la persona.

Factores de riesgo y protección ante las recaídas

Hay factores que favorecen la superación de la adicción y evitan las recaídas como:

Asimismo, hay factores de riesgo que pueden derivar en una recaída:

¿Cuándo se producen las recaídas?

Hay momentos en los que la persona se ve expuesta a una difícil decisión ante una situación de riesgo: realizar la conducta adictiva y conseguir una gratificación inmediata o posponer dicha gratificación inmediata manteniendo el control de la situación. Ante estas dos decisiones, las personas suelen tomar la primera vía, ya que se recuerdan y, por tanto, anticipan, los aspectos positivos inmediatos de la conducta adictiva, dejando a un lado los efectos negativos o consecuencias a largo plazo de realizar esta acción.
En este momento, la capacidad atencional de la persona realiza una selección automática de los efectos reforzantes de la conducta adictiva (“te sentirás mejor cuando consumas”), y aparecerán pensamientos como “yo controlo”, “es la última vez que lo hago”, etc.

Esto es especialmente probable al inicio de la abstinencia, ya que la persona aún no se siente con la suficiente seguridad en sí misma ni el control necesario para mantenerse en la “abstinencia”.

¿Cómo se pueden prevenir las recaídas?

Para trabajar sobre las recaídas, es fundamental intervenir sobre los problemas concretos de la persona y hacerlo con la ayuda de un/a profesional.

Referencias:

Blasco, J., Martínez-Raga, J., Carrasco, E. y Didia-Attas, J.(2008). Atención y craving o ganas compulsivas. Avances en su conceptualización y su implicación en la prevención de recaídas. Adicciones, 20, 365-376.

Echeburúa, E. (1999). ¿Adicciones sin drogas? Las nuevas adicciones. Bilbao: Desclée de Brouwer.

Sánchez-Hervás, E., Llorente, J.M. (2012). Recaídas en la adicción a cocaína: una revisión. Adicciones, 24, 269-279.

Tirapu Ustárroz, J., Landa, N. y Lorea Conde, I. (2003). Sobre las recaídas, la mentira y la falta de voluntad de los adictos. Adicciones, 15 (1).

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