Empecemos por definir términos. ¿Qué es un ataque de pánico? Es una reacción de ansiedad incontrolable y muy intensa, provocada por un miedo o temor muy fuerte. La persona puede llegar a pensar que se va a morir en ese momento.
¿Puedo sufrir un ataque de pánico mientras duermo? La respuesta es SÍ.
¿Cómo es un ataque de pánico nocturno?
Es muy similar a los diurnos, salvo porque no se pueden predecir, mientras que algunos diurnos sí. Es posible que la persona que lo sufra al día siguiente no recuerde lo ocurrido.
No suelen presentarse de forma aislada, sino que suelen aparecer durante el curso de sintomatología ansiosa que transcurre durante el día. Aun así, no son muy frecuentes.
¿Qué sintomatología aparece?
La persona se despierta con el corazón acelerado, sudando, con dificultades para respirar con normalidad y con un miedo intenso.
A raíz de estos episodios, la persona puede desarrollar miedo a dormirse, lo que puede desembocar en insomnio (evitación), empeorando así la salud de la persona. También se puede producir una ansiedad anticipatoria, lo que implica que el miedo a sufrir un ataque de pánico nocturno aumenta conforme se acerca la hora de dormir. Esto realmente es contraproducente, ya que lo que se consigue así es provocar incluso más ataques de pánico diurnos.
¿Cómo podemos enfrentarnos a estos ataques?
Es muy importante trabajar la higiene del sueño, evitar la cafeína, realizar técnicas de relajación, y la habituación, sobre todo cuando se teme quedarse dormido por si aparece un ataque de pánico nocturno.
Como para cualquier otro trastorno de ansiedad, es muy eficaz consultar con un profesional de la psicología para que nos ayude a superarlo.